¿Y si nos atrevemos sin epidural? Pros y contras...

Cuando los primeros garbancillos nacieron, al pasar al paritorio en la Maternidad de O'Donnell y después de mi paso por la sala de inducción (bastante breve), me preguntaron, como es protocolario, si quería epidural. Dudé. Pregunté si era malo para ellos. Me contuve. Y cuando la matrona me comentó que en un parto gemelar ella se la pondría sin dudarlo, me lancé decidida a las drogas y me acordé bastante del anestesista cuando, mientras yo me retorcía entre contracciones y los efectos del enema, él se hacía rogar. Estaba ocupado y se tomó su tiempo.

Luego alabé a San Epiduralio y hasta propuse su canonización en el whatsapp familiar. Estaba drogada y feliz. Y sin dolores. Aunque sentía los movimientos de los peques y pujaba sin problemas.
¿Y esta vez qué hacemos?

Hay detractores y defensores a ultranza de la epidural. Como en casi todo lo que tiene que ver con maternidad y crianza, me sorprende que en blogs y webs no traten tanto de informar sobre una u otra opción, como de dogmatizar sobre lo que es mejor, y por tanto te hace ser mejor mujer y mejor madre (algunos sí informan y con mucha sensatez, como éste).

Anestesista aplicando la epidural, en la zona baja de la espalda, sentada te dirán que abraces un cojín y te relajes

Si no soporto a las lactivistas (lo siento, pero integrismos los justos), tampoco aguanto a las madres-alfa de esas que piensan que si no pares en casa (o en el bosque) a pelo, y sin gine, y con doula, eres una mierdinis y una menos-madre (me pregunto si esas leonas no se hacen ecografías, ni triple screening, durante el embarazo ya que son tan naturales y tan detractoras de la medicalización)... Bueno, y si te hacen, cesárea!! entonces tú no has tenido un hijo! Avergüénzate.

Decía que me enfada mucho esa postura, pero, así y todo, lo que quiero es investigar lo que sea mejor para Garbanza III. Ya digo que no siempre lo que uno encuentra son argumentos objetivos, así que aquí compilo los que he encontrado yo. Como sea, una epidural es una analgesia, reduce el dolor, no debería dormirte, la que llaman 'walking epidural' (con la que te puedes mover perfectamente e incluso andar) sería la opción y no alternativas más heavies.

Vamos a los argumentos:

En contra de la epidural

•  Muchos partos, dicen que la mayoría (en el mío la ralentización no fue dramática pero el ritmo se paró un poquito) se ralentizan. Las contracciones se espacian (desde luego se sienten menos) y a veces incluso hay que recurrir a la oxitocina para reactivar la dinámica de parto. Los partos más largos, según creo, tienen más riesgo de sufrimiento fetal.
• Como hay a menudo menor sensibilidad, los pujos suelen ser, pongámoslo así, "menos eficientes" (leed este blog tan bien explicadito para entender mejor todo). Eso no solo se traduce en partos más largos sino también en mayor incidencia de "partos instrumentalizados" (en los que usan ventosas, o forceps o algún artilugio para ayudar a salir al bebé). En el de mis mellizos, desde luego, Garbancita necesitó forceps. El rollo de un parto instrumentalizado es 1) que la episiotomía suele ser más chunga (un día hablamos del suelo pélvico y sus apasionantes pormenores) 2) este es casi peor, que a tu pareja la sacan del paritorio o quirófano casi con total seguridad. Y ahí sola te quedas.
• Controlas menos lo del pis. Eso está claro. Así que es muy posible que empujando se te escape. Eso quiere decir que sonda que te cascarán (a mí me pasó) y que luego en el postparto tendrás que convencerles de que te la quiten (y no creáis que siempre es tan sencillo, a mí me costó casi 24 horas que me dejaran mear en paz). Ignoro si, sin haber recibido analgesia epidural, las posibilidades de control de esfínteres son mayores pujando (ni si va a ser esa tu prioridad en cualquier caso).
• Existen varias investigaciones que parecen indicar que haber usado la epidural, por los efectos hormonales que tiene (menos dolor, menos endorfinas que segrega tu cerebro para compensarlo, menos para ti, y menos también para tu cachorro), puede dificultar la instauración de la lactancia materna. Y la lactancia materna es peor que un doctorado, pronto os cuento mi periplo.

(esto poniéndonos optimistas y asumiendo que no tengamos otros efectos secundarios, no tan raros como, dolores de cabeza, caída de la tensión arterial -como prevención para evitarla te suministrarán suero y eso repercute en la lactancia-, escalofríos, infecciones en la zona de punción, vómitos o problemas de micción)

A favor de la epidural

• Esta clara la ventaja obvia principal. El dolor es mucho menor. Y queda a discusión de cada cual si sufrir merece o no la pena.
• En una entrevista muy interesante en el blog "Adoro ser mamá", la matrona Ana Fernández dice que la cesárea está indicada a hipertensas, diabéticas con insulina y mujeres con úteros hipertónicos, con dificultades para su relajación (ni idea de si esto tiene que ver con atonía uterina).

Como sea, la epidural tiene algunas contraindicaciones claras y, por ejemplo en mi caso, no podrían ponérmela si hace menos de 12 horas de mi última inyección de heparina (un hematoma en la médula espinal tendría consecuencias nada agradables). Tampoco les hace gracia si hay tatuajes en la zona baja de la espalda, insuficiencia cardiaca o algunos tumores.

Seguimos investigando. No sé si en segundos partos es más sencillo o al tener todos los bajos ya tocados dolerá más. No sé si acabaré pidiéndola a gritos. Ya os contaré...