Más estilismos de domingo... crezco y crezco, ay mi amol...

Otro domingo paseante y de exploración gastronómica (29+3) y esta vez nos atrevemos con un cubano al que hemos ido a cenar ya, pero que tiene menú del día los domingos, La Colonial, en calle Huertas.

Soberbios, memorables, espectaculares, de chupar el plato vaya, sus huevos a la cubana (obviamente, no son de dieta, lo pagaré en la próxima visita al endocrino, lo sé...ese plátano frito está demasiado rico) y deliciosísima y maravillosa su carne borracha, que se llama así porque en la cocción se añade ron, aunque me asegura la camarera que se evapora todo y que ella lo ha comido un millón de veces embarazada y que de verdad que no queda alcohol cuando se come. Decido creérmelo. Está impresionante.

From lost to the river y remato con un flan. Esto tendré que purgarlo (y efectivamente lo hago por la noche con una buena maratón de vómitos, que no creo que vengan a esas alturas ya nada que ver con el cubano sino más bien con que la cena me cae mal o con que Garbancita se me ha aposentado en el estómago).

El caso es que para el paseíllo posterior os enseño mi estilismo, por si os da ideas. No me veo yo muy guapa en las fotos pero era cómodo. Vaqueros de H&M, alpargatas de H&M y sudadera de manga corta de Lefties -no de premamá- de la talla XL (a darlo todo...)

Cara de empane total. Éste en el interior de La Colonial.

Feliz cual perdiz tras la buena comida

El Paseo del Prado, repostando

y aquí podéis apreciar que mi dimensión tripera no es nada desdeñable