Mi entrevista de curro rebañando la semana 38. ay

Cuando yo ya estaba en mi luna de Valencia, que si mudas, que si edredoncitos, que si cronometrar contracciones, que si expulso el tapón mucoso... recibí (este pasado martes) un email muy tentador que me ofrecía una oportunidad realmente gozosa, impartir, aquí en Madrid, aunque en una universidad estaounidense, un curso de verano de una materia verdaderamente apetecible, súper apetecible.

No sé si lo he dicho o no pero yo hago de eso, de profe.

Contesté al email con gran entusiasmo pero sin dejar de subrayar mi avanzado estado de gestación y la decana, recién reincorporada de su tercera (qué heroína) baja de maternidad, me dijo que nos conociéramos cuanto antes que con los gamusinos iba a ser mucho mucho peor. ¿Qué tal una entrevista al día siguiente mismo no fuera a parir antes?

Arfff

A priori pensé que yo ya no tenía mucho el coco para debatir temarios, cuestiones docentes, sistemas de evaluación ni mi trayectoria académicoprofesional siquiera... pero luego me dije 'from lost to the river'. Ve, sé tú misma y si les gustas, pues estupendo y, si no, estupendo igual... en todo caso seguro que valorarán tu arrojo por acudir a una entrevista tan casi parida... y a las malas, rompemos aguas en el campus y les regalamos una anécdota para la posteridad.

Mi segunda preocupación (yo soy así de banal) fue la indumentaria, el estilismo. Que una cosa es ir de paseíto por Madrid en leggings y desenfadadamente y otra ir a una entrevista de curro. 

La verdad es que la entrevistante en cuestión no pudo ser más amable y cerró su último correo con un "ni se te ocurra preocuparte por el 'qué me pongo' que me hago cargo de cómo estarás". Esa nota me pareció encantadora y me dio más ganas de no ir hecha un adefesio. 

Me puse mis nuevos leggings trendy de color verde (del chino de abajo pero rabiosa tendencia, que el tartán es un 'must' este otoño-invierno), una blusa blanca que compré en Noruega durante nuestra luna de miel (es oversize y cerraron los botones! Estaba pletórica de orgullo) y mi rebeca negra híper comodín, que con eso de ser larga y tal, me parece como que estiliza un poco (un poco, un poquitín). Encima, mi gabardina de Zara que es la única pieza de abrigo que me cierra. Zapato plano, lo siento, que por el tacón sí que no paso. Contraviniendo mis costumbres de las últimas semanas, me maquillé, que eso hace mucho... o algo....digo yo...

Y para allá que fuimos. Tal que con esta pinta.

Sin el amore y con mi truño móvil, mis fotos son muy limitadas

La verdad es que no sé si la entrevista salió muy bien. La decana me preguntó más por mi FPP, contracciones y pronóstico familiar que por mis ideas para las clases y me dejó claro que tenían que entrevistar a más gente.

Pues bueno. Ellos seguro que no están tan preñados como yo.

El bedel me dijo ¡coge el ascensor! pero yo he preferido las escaleras. Tengo muchas muchas muchas ganas de que los bebés nazcan ya.