Pelis para ver embarazada (1) Babies

En este proceso de documentación un poco caótica de lo que es ser mamá, hay algunas pelis y documentales que merece la pena ver. Si me da tiempo, iré hablando de los que me han gustado más o me han parecido más recomendables.

Diga lo que diga IMDB, uno de los más bonitos y curiosos, es el que dirigió el francés Thomas Balmes y que lo mismo habéis visto ya, BABIES.




En la peli no es que hablen mucho, la verdad, no dicen casi nada, pero se muestran de una manera muy clara las diferencias en cuanto al nacimiento y la primera infancia (estimulación, educación, contacto con otros bebés, tiempo de ocio, cuidados, juguetes...) de cuatro bebotes en cuatro rincones muy distintos del mundo: Una rubita preciosa, Hattie, en California, Bayar, un muñecote lindísimo, en una aldea de Mongolia, Mari, una cría deliciosa y con posibles, en una urbe japonesa y mi prefe total, Ponijao, una niña comestible del todo, en un poblado Himba de Namibia.

¿no es increíblemente linda?
Y, así, es maravilloso. Porque, pese a los rituales tan diversos, pese a las costumbres tan radicalmente distintas, pese a la sorpresa que sentimos viendo este documental... todos los niños 'crecen', aprenden y evolucionan, y comienzan a caminar y balbucear, y se relacionan con sus mamás y papás y otros niños y el entorno, aunque sean entornos radicalmente diferentes...

Me resulta fascinante ver a Bayar, el bebé mongol, completamente convertido en un rollito de primavera, inmóvil, solito, mientras su madre cuida el ganado, verle observar sencillamente durante semanas o meses, incluso atado a la cama cuando empieza a gatear y trastear, con su hermanito mayor (que le putea a ratos)... para luego acabar convertido en todo un explorador... Y es increíble descubrir cómo se cría la bebé naminia, Ponijao, imitando todo desde que era un mico, en contacto desde apenas nacida no solo con sus ocho hermanos y hermanas, sino también con los animales (los perros, los insectos...), con otros bebés de otras mamás, con montones de mamás, con la tierra (la escena del preparto de Ponijao es absolutamente preciosa).

Las peques occidental y nipona nos parecen más cercanas a lo que vivimos en España, mucho más mimo (material) también mucho menos tiempo, una sobreexcitación un poco epiléptica en Mari, la japonesita...

Total, que no destripo más. Es una comparación curiosa y me parece que reveladora a menudo, para que no demos tantas cosas por sentadas y recapacitemos sobre lo fascinante e iluminador que puede ser criar a nuestros hijos.

¿A vosotras os gustó? ¿me recomendáis otros documentales o pelis en esta línea?

Comentarios

  1. Me han entrado muchas ganas de ver el documental,mañana mismo lo busco.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. A mí me pareció amoroso. Luego me cuentas si te ha gustado, Mamá Pingüina!! que ya te queda poquito...

      Eliminar

Publicar un comentario

Entradas populares